El cuentacuentos tiene que variar el escenario

   Razones de fuerza mayor, de respeto, obligaron ayer a cambiar el escenario del cuentacuentos. Estaba programado en el palacio de Montarco, pero ayer se celebró en Ciudad Rodrigo una misa funeral en la Catedral por Eduardo de Rojas, conde de Montarco, y la asistencia de familiares y amigos determinó que se cambiase el espacio escénico al patio del palacio de Los Aguila, en donde María Jesús Lillo interpretó su segundo cuentacuentos. 
   Decenas de niños siguieron la narración de Lengua de trapo , una serie de historias --"cuentos inocentes para niños inteligentes"-- que favorecen el desarrollo sano de los niños, transmitiéndoles valores universales como respeto, aceptación de los demás y de sí mismo, confianza, seguridad... de la mano de los personajes que presenta Lillo, que se encontrarán con muchas dificultades y obstáculos que tendrán que afrontar para finalmente salir, como salieron, victoriosos como en La reina de las abejas . 
                         

Varios niños siguen el cuentacuentos en el palacio de Los Aguila. Foto:Vicente